¡Haz que tus etiquetas duren más con estos consejos!
Como empresa, es de gran importancia que tus productos tengan una apariencia de buena calidad, y una
etiqueta bonita ayuda con eso. Es importante que la etiqueta no se desvanezca, se desgaste o se
despegue rápidamente. Para ayudar con esto, Zolemba ha recopilado una serie de consejos y
recomendaciones valiosos para asegurar que tus etiquetas se mantengan en buen estado por más tiempo.
Sigue leyendo para descubrir los pasos que puedes tomar para optimizar la duración de tus etiquetas.
Con estos consejos, no solo ahorrarás costos sino que también mantendrás una apariencia profesional
para tus productos.
Algunos aspectos tratados en este blog son:
Una etiqueta puede verse afectada de muchas maneras por diversos factores ambientales. Hemos enumerado estos aspectos a continuación junto con la mejor solución para extender la vida útil de tu etiqueta.
La capa adhesiva
Todas las etiquetas tienen una capa adhesiva, y esta capa tiene una fecha de caducidad. Esta fecha de caducidad varía para los adhesivos permanentes y removibles. Desde el momento en que las etiquetas se producen en Zolemba, una capa adhesiva permanente dura 2 años. Para el adhesivo removible, es 1 año, siempre que almacenes tus etiquetas en un lugar fresco, oscuro y seco. Después de ese período, el adhesivo se debilitará y adherirá de manera menos efectiva. Por lo tanto, ten en cuenta aplicar siempre tus etiquetas dentro de ese tiempo. La fecha de caducidad de estas capas adhesivas no es fija; el entorno en el que se utilizan las etiquetas influye en la adhesión. Por lo tanto, es mejor hacer pedidos más pequeños cada 3 meses en lugar de un gran pedido por año, simplemente porque las etiquetas estarán más recientemente producidas.
Para maximizar la vida útil de tus etiquetas, Zolemba recomienda evitar los siguientes aspectos:
La luz solar directa
La exposición directa a la luz solar y a los rayos UV puede resultar en el desvanecimiento o cambio de color de la etiqueta. También puede disminuir la legibilidad y calidad de la etiqueta. Esto lleva a una apariencia deteriorada y pérdida de identidad de la marca. Además, ahorrarás costos y esfuerzo al no tener que reemplazar constantemente tus etiquetas. Para prevenir el cambio de color y el desvanecimiento, se recomienda almacenar tus etiquetas en un lugar donde no estén expuestas directamente a la radiación UV. Zolemba aconseja guardar tus etiquetas en un espacio oscuro, fresco y seco, preferiblemente en su embalaje original bien sellado.
Contacto con productos químicos
La exposición a productos químicos también puede causar el desvanecimiento del color. Esto tiene un impacto negativo en la legibilidad y la atractividad visual de la etiqueta. Los productos químicos también pueden comprometer la fuerza de unión del adhesivo, lo que resulta en una mala adherencia y fácil desprendimiento del producto. Los productos químicos también pueden causar corrosión del material, lo que significa que ciertas sustancias químicas pueden dañar físicamente la etiqueta. Esto resulta en rasgaduras, agujeros o debilitamiento de la estructura de la etiqueta. Para evitar que tus etiquetas se deterioren rápidamente al entrar en contacto con productos químicos, se recomienda aplicar un recubrimiento transparente que proporcione una mejor protección contra condiciones adversas. Para etiquetas en blanco, Zolemba sugiere usar el material "thermal top" para una mejor protección contra sustancias dañinas.
Temperaturas extremas
A altas temperaturas, existe el riesgo de debilitar el vínculo adhesivo, causando que la etiqueta se afloje o se despegue fácilmente. Las altas temperaturas también pueden llevar al desvanecimiento, particularmente para materiales sensibles al calor, lo que puede afectar la legibilidad. Además, tanto las temperaturas altas como las bajas pueden causar distorsión de la etiqueta. El calor excesivo puede hacer que la etiqueta se encoja o se doble, mientras que las temperaturas muy bajas pueden causar expansión o endurecimiento de la etiqueta, resultando en desgarros del material. Para asegurar que tus etiquetas no se vean afectadas por temperaturas excesivamente altas o bajas, Zolemba aconseja almacenarlas a temperatura ambiente para una durabilidad óptima.
Humedad
El contacto excesivo con la humedad también puede tener consecuencias negativas para tus etiquetas. Diferentes materiales pueden deteriorarse en un ambiente húmedo. Específicamente, las etiquetas de papel pueden arrugarse debido a la humedad. La humedad excesiva también puede resultar en pérdida de adhesión, afectando en gran medida la capa adhesiva. Por último, existe el riesgo de crecimiento de moho y bacterias, lo que puede llevar a manchas, problemas de olor y degradación del material. Esto no solo compromete la funcionalidad sino que también pone en peligro la higiene. Para prevenir la entrada de humedad y el crecimiento de moho, es importante almacenar las etiquetas en un ambiente seco.
Manejo brusco
Esto se refiere a las fuerzas físicas a las que las etiquetas están expuestas durante el almacenamiento, transporte, manejo y uso. Demasiada presión, fricción, abrasión o impacto pueden resultar en rasgaduras o deformaciones de la etiqueta. Además, con el tiempo, la adhesión del adhesivo puede disminuir con la carga repetida de la etiqueta y causar desgaste, haciendo que la etiqueta ya no sea legible. Para evitar esto, es importante que tus etiquetas estén hechas de materiales resistentes y duraderos que puedan soportar mejor el estrés físico. Un buen ejemplo son las etiquetas de polipropileno. También es importante que evites el esfuerzo donde puedas, como en el manejo y almacenamiento, por ejemplo. Por ejemplo, no pongas productos unos contra otros, ya que esto puede causar que las etiquetas se desgasten.
La mejor manera de almacenar tus etiquetas
Zolemba recomienda mantener tus etiquetas en un lugar fresco, seco y oscuro para minimizar los riesgos mencionados. También es aconsejable mantener tus etiquetas en su embalaje original y sellarlas bien para protegerlas del polvo, la humedad y la contaminación del aire. Al utilizar las etiquetas, también es importante no manejarlas de manera brusca, ya que esto puede causar daños. Evita el doblado, plegado o frotamiento innecesario que pueda dañar la etiqueta. Al mantener condiciones de almacenamiento adecuadas, las etiquetas conservan su color, adhesión y legibilidad. Esto asegura una apariencia profesional y clientes satisfechos.